Diseñar un departamento para una pareja joven que pretende ocupar el espacio por algún tiempo (15 años) trae consigo el siguiente problema: como proveer soluciones a futuras necesidades sin comprometer el aprovechamiento del espacio y hacer esto dentro de una envolvente existente, estas son algunas respuestas propuestas:

Flexibilidad- La posibilidad de abrir o cerrar el gran muro de acero inoxidable nos permite acomodar distintas formas de vivir el espacio, la cocina puede ocupar un papel estelar (la clienta es aficionada a la cocina) o secundario (una cena formal que requiera de un área de apoyo para el servicio).

Maximización espacial- Utilizamos tres estrategias: la primera consistió en eliminar del programa una tercera recámara ya que ésta sería inútil por varios años (mientras llegan los hijos) atendiendo preocupaciones de los clientes de una adecuación complicada futura propusimos dejar las instalaciones hidrosanitarias preparadas debajo de una caja de acero que mientras tanto funciona como un mini-jardín zen; segundo, se expuso toda la estructura existente y ganamos así cerca de un metro de altura, y tercero, se agruparon los servicios (baño de visitas, guardado, servicio) en un cubo de madera y logramos la máxima amplitud visual.

Utilizar el termino “Loft” hoy en día es en el mejor de los casos controversial, creemos que con ciertas reservas podemos utilizar este título pues las características anteriores parecen ser constantes en la mencionada tipología.